La Panadería La Cruz lleva una década desde que su propietaria, Laura Esteban Martín, decidiera abrir este negocio en la plaza de Villabrágima.

Su especialidad es la realización de un pan con mucha harina y horneado en leña, tal como decía la receta tradicional de los abuelos de su compañero de negocio, Juanjo Cardeñosa Moreno quien considera que es su apuesta por lo artesano, uno de los puntos fuertes del negocio y lo que diferencia sus productos del resto.

En su panadería también puedes encontrar pastas, bollos, lazos de hojaldre, tortas de chicharrón y sus famosas magdalenas. Ofrecen también servicio de asado en horno de leña y elaboración de tartas de hojaldre por encargo.

El cuidado del medio ambiente es importante para esta empresa familiar por lo que se encargan de que la materia prima para la elaboración de sus productos sea siempre de cercanía. En el proceso de elaboración los residuos generados son prácticamente nulos teniendo solo que ocuparse del reciclaje de los embalajes de los mismos, la mayoría papel y cartón.

A pesar de que Castilla y León ha reducido el consumo de pan desde los años 90, lo que se nota en la venta; su apuesta por lo tradicional y la oferta de productos diarios es lo que hace funcionar su negocio. Pues, el trabajo duro es muy importante en todo negocio, pero consideran que, a veces eso no es suficiente e influyen otros factores menos controlables como el estar en el sitio adecuado en el momento adecuado.

Para ambos mantener los pueblos vivos es imprescindible para el desarrollo de actividades empresariales en las zonas rurales, pero creen necesario aumentar servicios y facilitar la apertura de nuevos negocios. Agradecen el apoyo de familiares, amigos y ayudas como el LEADER.